Los principales productos del sector lácteo estadounidense
Estados Unidos, pese a contar con alrededor de la mitad de vacas lecheras que Brasil o la Unión Europa y seis veces menos cabezas que la India, se ha logrado afianzar como el segundo máximo productor de leche del mundo. De hecho, se estima que en 2023 estará detrás de cerca de 228.500 millones de libras –o lo que es lo mismo, unos 103,6 millones de toneladas métricas- de este nutritivo líquido blanco, alcanzado así un nuevo récord. Ahora bien, de dicha cantidad sólo en torno a la tercera parte se destina al comercio interior, ya que la población bebe en promedio algo menos de 30 millones de toneladas anualmente. Esto permite a la industria láctea estadounidense no solo abastecer la demanda nacional sin recurrir en exceso a otros mercados –ni siquiera aparece entre los 15 primeros importadores-, sino crear además un abundante excedente para vender internacionalmente, lo que ha contribuido a posicionar al país de las oportunidades como el tercer máximo exportador, únicamente por detrás de Nueva Zelanda y Alemania.Dentro de las fronteras nacionales, no obstante, el queso le ha ido ganando terreno en los últimos años y en 2022 ya aportaba al sector unos 200 millones de dólares más que el que ha sido tradicionalmente el máximo exponente de esta industria. ¿El motivo? La creciente popularidad entre sus residentes, que han pasado de comer menos de 2.100 millones de kilogramos a 2.210 millones en apenas un octenio. Ante esta situación, las fábricas también han ido aumentando su volumen de producción, que en 2020 alcanzaba por primera vez los seis millones de toneladas a pesar de la situación de caos en las cadenas de suministro derivada de la pandemia que llevó incluso a la Dairy Farmers of America (DFA) a solicitar a los ganaderos que se deshicieran de la leche ordeñada y ya en 2022 rozaba los 6,4 millones.